Toda empresa de confección tiene una gran preocupación cuando la prenda creada llega al sector de corte: ¿cómo tener un buen aprovechamiento de tela y reducir los costos de producción? Esta pregunta no tiene una respuesta cerrada. Son muchos los factores que influyen e interfieren en esta etapa del proceso, pero hay posibilidades de implementar mejoras, especialmente cuando pensamos en la confección de escala industrial.
Se entiende el aprovechamiento de tela como la cantidad de tela a utilizar en el proceso de corte, dado que la tela que sobra se desperdicia y eso influye directamente en el costo de la prenda. El consumo, por lo tanto, es la cantidad de tela utilizada para cada prenda y es lo que determinará el costo del producto. El desperdicio forma parte del proceso, pero podemos minimizarlo.
Uno de los recursos es la creación de mapas de corte con trazos para una cantidad mayor de modelos. Esto se puede hacer a través de la tecnología CAD que permite el mejor aprovechamiento de tela en el mapa de corte y ofrece una mejora en el consumo, influyendo en el precio de la prenda.
El objetivo principal debe ser mejorar el consumo, aunque aumente el aprovechamiento en función del costo. Las lagunas en el mapa se pueden llenar con más prendas a cortar, con mejor aprovechamiento de tela, pues eso tendrá un impacto positivo en el costo del producto. Si el mapa de corte ya está todo ocupado, no quedará otra alternativa que utilizar más tela.