En el post anterior, presentamos el Modelo CEvI. En este texto continuaremos abordando el tema. En este caso veremos la importância que tiene conocer las transformaciones que el cuerpo sufre en las diferentes etapas de la vida (niñez, adolescencia, adultez y vejez) para el mundo de la moda.
La industria de la vestimenta es uno de los sectores productivos considerados entre los más emergentes en términos de consumo mundial y de los que despiertan gran interés por la mayoría de las sociedades. Mismo en mercados considerados maduros, como los países de Europa Occidental, el uso de tendencias de comportamiento y del ciclo de vida de los productos, dan soporte para la expansión de esta industria.
Sin embargo, se observa que pocos son los modelos que llevan en cuenta la dimensión física, que afectan todas las edades y biotipos, como postula el modelo CEvI (Rocha et al, 2005; Rocha, 2007). Esta valorización indica el papel primario de formas y cuerpos, la ergonomía y antropometría, como factores importantes en el desenvolvimiento de productos para consumidores, sean ellos jóvenes o adultos.
Las alteraciones que ocurren en el cuerpo, relacionado al crecimiento, madurez y envejecimiento, deben ser consideradas en el diseño de modas para garantizar que la ropa tengan los ajustes adecuados y de esa manera cubrir las expectativas de los consumidores de todas las edades.
Es cierto que las dimensiones del cuerpo y aspectos tales como movimiento, flexibilidad, alcance, fuerza, estructura, apariencia, entre otros, cambian con la edad. Esto sugiere que aplicar principios de ergonomía y de antropometría se vuelve esenciales en el diseño de modas. Los estudios antropométricos suministran informaciones importantes sobre los cambios que ocurren en la silueta corporal en las diferentes etapas de desarrollo humano.
Así, podemos observar, que el cuerpo de los niños se caracteriza por cabeza grande, espalda curvada y abdomen ligeramente saliente. En las mujeres, durante la adolescencia se inicia el ensanchamiento de las caderas y desarrollo de los senos, llegando a la forma arredondeada alrededor de los 20 años.
Cambios en la silueta femenina a lo largo de los años
Cuando la mujer se aproxima de los 30 años de edad, la grasa corporal comienza a saturarse y acumularse, generando prominencia abdominal a los 40. En seguida viene el debilitamiento muscular de los senos y nalgas, y a los 60 la espalda se arredondea y curva.
Además de todo lo mencionado cabe considerar que las diferencias físicas, no son oriundas apenas del envejecimiento, sino que hacen parte de la diversidad humana natural, juntamente con los aspectos étnicos y raciales. En este sentido se puede destacar la reciente demanda por tallas mayores y modelos que se adapten a las formas heterogéneas de cuerpos, tanto para las vitrinas como pasarelas, editoriales o medios publicitarios.
Por otro lado, de acuerdo con el estudio de Wacoal (2000), a medida que las mujeres perciben que su cuerpo está cambiando, comienzan a tomar cuidado para impedir estas transformaciones, fortaleciendo o remodelando sus cuerpos, con dietas, ejercicios, dietas o procedimientos quirúrgicos para la alteración de sus medidas. Este hecho debe ser otro factor que debe ser llevado en consideración durante la creación de moda.
Referencias
ROCHA, M. A. V. Study of Consumer Clothing Behaviour and its Relevance to Successful Fashion Product Development. 2007. Thesis (PhD in Fashion Design). University College for the Creative Arts/University of Kent, United Kingdom.
ROCHA, M. A. V.; HAMMOND, L. & HAWKINS, D. Age, Gender and National Factors in Fashion Consumption. Journal of Fashion Marketing and Management, Volume 9, Issue 4, pp. 380-390, 2005.
WACOAL. Spiral Ageing. The Human Research Center, 2000. Disponível em https://www.wacoal.ph/mvc/page/p-4. Acesso em 20/03/2013.
Por Maria Alice Rocha
Doctora (PhD) en Design de Moda